Bosk: avance de la Essen/GenCon 2019

Bosk: materiales

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Bosk es un competitivo para 2-4 jugadores, duración 30-40 minutosdestinado al público habitual (mayores de 13 años), basado en mayorías y control territorial.

Cómo jugar Bosk

El tablero es cuadrado, de doble cara: para dos jugadores y para tres o cuatro (el de cuatro tiene una sección extra de cuadros periféricos) e incluye ocho tipos de terreno diferentes que, como veremos, será importante para el segundo y último resultado del partido.

Bosk: materiales

Cada jugador tiene a su disposición
ocho árboles
(del tipo 3D creado por el enclavamiento de dos piezas perpendiculares) numeradas del uno al cuatro (1,1,2,3,3,4,4); luego ocho fichas de hoja numeradas (una con el símbolo de la ardilla), finalmente una multitud de fichas de hoja y una ficha de ardilla.

El juego consta de cuatro rondas, cada una diferente de la otra y correspondientes a las estaciones del año:

  • primaveraLos jugadores colocan árboles en las intersecciones de la cuadrícula;
  • veranoLos jugadores cuentan las mayorías, calculando los valores del árbol, en cada fila y columna del tablero. Los puntos castigan los empates;
  • otoño: ahora cada jugador, en su turno, elimina su propio árbol asociándolo a una ficha de hoja, cuyo número indica al jugador cuántas fichas de hoja colocará partiendo del árbol y extendiéndose luego tantas casillas adyacentes (incluso en diagonal) en cualquier dirección. No sólo eso, sino que las hojas deben distribuirse en la dirección del viento (hay una tabla especial para indicarlo). Colocar hojas encima de las de otros es posible, pero para hacerlo debes descartar hojas adicionales de tu mano iguales a las que ya están en la casilla. Si juegas la ardilla, puedes colocarla a menos de tres casillas del árbol, encima de cualquier montón de hojas, sin pagar nada y sin peligro de que otra ardilla la quite;
  • inviernoPara cada tipo de terreno, se cuentan las hojas de cada jugador y, de nuevo, se toman puntos por las mayorías, contando la ardilla como su propia hoja. Los puntos de victoria de este segundo recuento son mayores que los del primero.

Al final, quien tenga más PV es el ganador.

Primeras impresiones

No tengo ni idea de si los autores han jugado o no FotosíntesisEs cierto que la deuda con este juego es evidente. El mismo impacto estético, los mismos colores, la misma abstracción subyacente.

Bosk: juego

Pero al mismo tiempo
Bosk

es un juego diferente, que tiene un desarrollo diferente
quizás más abstracto que su predecesor, pero al mismo tiempo más dinámico y variado.

Me gusta el hecho de que el las dos mitades del juego (primavera+verano vs. otoño+invierno) están bastante conectadasaunque la distribución de sus hojas tenga entonces una gran libertad: quizás habría preferido unas restricciones más estrictas para vincular mejor la posición inicial de los árboles a la caída.

También me gusta el hecho de que se preste atención a las pequeñas sutilezas de las normasPor ejemplo, el primero en empezar la fase de otoño es el que tiene menos puntos de victoria al final del primer recuento y también decide en qué lado del tablero colocar la pista de viento, teniendo así al menos una pequeña ventaja topológica.

La duración, las reglas y la complejidad lo sitúan, como todavía para Fotosíntesis, en un grupo objetivo difícil, un poco lejos de los juegos familiares, un poco más allá del relleno, menos que un peso medio y, en última instancia, en ese nebuloso punto intermedio que quizás podría ser adecuado para el Kennerspielaunque la abstracción y la matemática que la impregnan constituyen un obstáculo adicional para el jugador medio.

Aquí, entonces, me imagino que tendrá una pequeña audiencia, este Bosk, tal vez sin lograr la buena fortuna que la calidad del juego sugiere entre las líneas del manual.

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